La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), encargada de investigar y juzgar los crímenes más graves cometidos en el marco del conflicto armado colombiano, continúa avanzando en el desarrollo de sus macrocasos, que abordan conductas que constituyen graves violaciones de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario.
Desde su inicio en 2018, la JEP ha abierto un total de 11 macrocasos, priorizando aquellos con mayor impacto y representatividad. Estos casos han sido seleccionados y categorizados según criterios que consideran diversas dimensiones, incluyendo el impacto de los crímenes en las víctimas, tomando en cuenta factores como género, edad y condiciones socioeconómicas.
Entre los macrocasos más relevantes que involucran a miembros de la Fuerza Pública se encuentran el Macrocaso 02, que investiga violaciones de derechos humanos en municipios de Nariño; el Macrocaso 03, que se enfoca en los asesinatos y desapariciones forzadas presentados como bajas en combate; y el Macrocaso 08, que abarca crímenes no amnistiables cometidos por miembros de la Fuerza Pública en asociación con grupos paramilitares.
Hasta la fecha, 4.236 miembros de la Fuerza Pública han suscrito actas de compromiso y sometimiento ante la JEP, de los cuales 105 han sido llamados a reconocer su responsabilidad en los hechos investigados. Sin embargo, 12 de estos miembros no han reconocido responsabilidad, lo que ha llevado a la presentación de cargos y al inicio de juicios adversariales en su contra.
La JEP se encuentra ahora en la fase de espera para la imposición de las primeras sanciones propias, que serán dictadas por la Sección de Primera Instancia para Casos de Reconocimiento de Verdad y Responsabilidad del Tribunal para la Paz. Aquellos comparecientes que no han cumplido con las condiciones establecidas podrían ser remitidos a la Unidad de Investigación y Acusación (UIA) o incluso expulsados de la jurisdicción.
Estos avances en los macrocasos subrayan el compromiso de la JEP con la justicia transicional y la búsqueda de la verdad, al tiempo que representan un importante paso hacia la reparación de las víctimas del conflicto armado colombiano.
